LOS MOLESTOS GASES INTESTINALES
Fecha: 22-05-2012 - Categoría: Alimentación
Si bien los gases intestinales son aire presente de manera natural en el tracto digestivo, la flatulencia o aerofagia es en ocasiones muy molesta e inoportuna. Puesto que la producción de gases es inevitable, conviene que conozcamos algunas de sus causas y remedios.
El estómago no es un órgano productor de gas, sino que todo el aire que eructa es aire que se ha deglutido, bien como parte del contenido alimentario o como aire tragado de forma involuntaria o inconsciente.
Descartando enfermedades del aparato digestivo e intolerancias a determinados alimentos, la aerofagia debe considerarse un trastorno de la conducta alimentaria.
Hábitos como el comer deprisa, consumir un exceso de alimentos ricos en fibras poco digeribles (legumbres, cereales, lácticos, verduras, fruta con piel, bebidas con gas, edulcorantes artificiales, frituras, algunos medicamentos, así como diversos aspectos psicológicos desempeñan un papel importante en la aerofagia.
Paradójicamente, la fibra que es muy importante para el buen funcionamiento de la flora intestinal, puede ocasionar gases durante su digestión.
Los síntomas más habituales son: hinchazón abdominal, malestar o dolor abdominal, eructos o gases rectales.
El tratamiento consiste básicamente en la aplicación de terapias conductuales, a base de introducir modificaciones en la dieta como:
- Tomarse el tiempo necesario para comer, masticar de forma adecuada y con la boca cerrada, comer despacio, sin prisas, no hablar mientras se come
- Sustituir los alimentos propensos a la formación de gases durante algún tiempo, hasta mejorar los síntomas, y después, consumirlos de nuevo en pequeñas cantidades y comprobar la reacción del organismo.
- Realizar ejercicio físico regularmente.
- Romper el hervor mientras se cuecen las legumbres: bien al retirarlas del fuego o al añadir agua fría.
- Pelar las frutas, consumir piña y papaya, cuyas enzimas ayudan a la digestión y evitan la formación de gases.
- Tomarr infusiones de manzanilla, canela o cardamomo después de la comida, para una mejor digestión.
